jueves, 27 de marzo de 2008

La profundidad

Salía de mi clase de Yogates, cuando mi PDA me notifico un nuevo mail, de mi amiga Karen. En el asunto una única frase: “¿Queréis ver lo que he comprado para la empresa?”.

Nos citaba a todos los interesados en el scream&go esa misma noche, como comprenderéis, no tenía otra elección que acudir…

Mientras esperábamos, tomando nuestro habitual cosmo, tratábamos de adivinar cual sería la novedosa adquisición. “¿Os acordáis de la ultima?” Les pregunte riendo. “¿Era el rubio de los ojos azules o el moreno de los ojos negros? Nunca me acuerdo…” Contesto Lucy “Y cuando importo, a… ¿Cómo se llamaba? ¿Marco? Era italiano, ¿no?” interrumpió Lara. “creo que griego…”afirmo Bob.

Mientras seguíamos riendo, apareció Karen. Nuestra amiga era una experta en buscar posibles socios para su empresa, que tenían la misma duración en su vida que cualquier complemento de Hermes…

Se acerco a nosotros, sonriendo y… sola. “No me miréis así, esta aparcando…”. “Bueno, danos un adelanto ¿no?” dijo Lucy impaciente. Karen sonrió “Rubio, ojos verdes, 3 horas de gimnasio al día, 2 carreras, 2 máster, se cuida… pero…”. “Suena bien” dijo Lucy, “¿Tiene un hermano?” pregunto Bob. “¿Y una hermana?” Pregunto Lara. “¿Peroooo?” La mire a los ojos y bajo la mirada “Es un profundo…” Dijo susurrando. Se hizo un silencio absoluto, roto al instante por el “joder” que soltó Lucy, el “Necesitamos al menos dos rondas mas” de Bob y lo único que pude decir yo “Genial…”

¿Alguna vez habéis hablado con alguien que ha realizado una afirmación que os ha hecho pensar “vaya, que profundo…” y habéis deseado seguir con la charla porque os parece que esa persona tiene una “profundidad” que la hace interesante?, bien, pues un profundo es todo lo contrario, es una persona con la que hablas dos minutos y solo obtienes una sonrisa y un sí o un no, y no porque sea una persona tímida, sino porque no da para más, es lo que yo llamo tener la profundidad de un charco… Así que imaginaos lo que sentimos cuando Karen nos comunico que íbamos a conocer a un profundo…

El profundo llego, y era tal y como lo había descrito Karen, y por Dior, os aseguro que intente hablar con él, si hasta intente hablar de… ¡futbol! Pero solo obtuve de él una sonrisa…

Así que desistí, decidí volver a mi casa, me despedí de Karen y solo podía pensar en que quizás la vida de un profundo no era tan mala, solo tenias que dedicarte a cultivar tu cuerpo y a sonreír, tu única función en la vida es hacer bonito… Quizás éramos nosotros los equivocados… Pero, una comparación cruzo mi mente en ese mismo instante… también puedes invertir en arte, que también hace bonito y nunca nunca pierda valor.

Así que, mi consejo es que vayáis a la galería más cercana y compréis el cuadro que mas os guste, tiene la misma profundidad que un profundo y se revalorizara más. Palabra.

JuanmaX

XOXO

1 comentario:

Daniel dijo...

¿Sabes? Me acabas de llamar de profundo. Soy de esas personas que en las conversaciones "profundas" se queda callado obervo, me siento un ignorante, a lo mejor esbozo una sonrisa... pero siempre me siento fuera de lugar...
Perdon por el retraso en escribir y gracias por aceptar mi invitación el Windows Spaces... seguire pasando por aqui